Su aspecto es parecido al de las series de amplis de válvulas Fender , con un acabado en tolex marrón claro , una rejilla frontal en beige/marrón con una placa matálica que identifica el modelo y un panel frontal en imitación de madera.

Su panel de controles se divide en dos canales distintos; uno para instrumento acústico y el otro para voz señal de línea. Para la entrada de micrófono dispone , muy acertadamente , de una entrada balanceada de tipo XLR , que es el estándar profesional para conexiones de audio y proporciona una reducción considerable de ruidos de fondo e interferencias parásitas. El canal de instrumento posee una etara de ganancia , una sección de tonos de tres bandas , un control denominado String Dynamics , que modifica las carcterísticas de ataque de la cuerda , otro control denominado Feedback Notch , que es un filtro para reducir realimentaciones , y un último control de envío de señal hacia el procesador de efectos ( DSP ), así como una entrada de inserción , por si se quiere entrar directamente en las etapas de efectos y de amplificación del combo ( prescindiendo de sus canales de preamplificación ) a partir de la salida de previo de otro amplificador , procesador de efectos, etc., beneficiándose de la dispersión SFX del Acoustasonic. El otro canal dispone de los mismos controles a excepción del de dinámicos de cuerda , que no necesita.

¿ Realmente funciona lo de la dispersión circular del sonido? Pues sí. Y de manera muy convincente. Es sorprendente cómo el sonido de tu instrumento envuelve literalmente todo el espacio donde estás tocando , produciendo un sonido muy amplio y lleno de sutiles matices , sobre todo cuando se complementa con alguno de los efectos de reverb o delay que incluye el amplficador , en este caso el sonido original y los retardados te invaden por todos lados de forma aleatoria. Un amplificador dedicado a los instrumentos acústicos no es exactamente como uno de guitarra eléctrica. Debemos recorgar que la guitarra eléctrica no tiene , por sí misma , un sonido concreto , si no que depende de pastillas , amplificador , efectos y de lo que el instrumentista crea oportuno en el momento en que construye ese sonido. Está claro que el instrumento acústico genera un sonido determinado por sí mismo , sin necesidad de amplificación , y la fidelidad con que el Acoustasonic reproduce el timbre del instrumento es bastante consistente (siempre va a depender de la calidad del sistema microfónico empleado y de los ajustes que realices en el ampli ) aunque , a mi entender, quizá un poco exagerado en el ataque de cuerda , bastante percusivo incluso cuando se ajusta intensivamente el control de String Dynamics. Aún así , en general , estamos ante un buen amplificador , con un sonido bastante correcto y prestaciones exclusivas realmente útiles.

Con un poco de pociencia , se puede realizar un ajuste de la sección de ecualización y dinámicos de cuerda que de como resultado un sonido lo suficientemenet fiel con respecto al natural del instrumento.

La sección de efectos es correcta , suena bien y los efectos son acertados y útiles para la guitarra acústica , sin ninguno que esté de sobra , aunque con la limitación de ser presets (es ecir , ajustes prefijados) y no tener opción de alterar sus parámetros.